El Promesicas desde dentro
21 de mayo de 2022
Fotos de José Silvestre y de Marta Gill de Albornoz
Colaboradores del Club La Salle-Caja Rural de Teruel y atletas participan activamente en los trabajos previos, montando el circuito y organizando todo para que el Promesicas salga bien...
Todo va bien, y eso que son las 14 h de un día muy caluroso.
Ángel Bugeda lleva años siendo el diseñador del circuito. Es una persona imprescindible en el Promesicas.
Cualquier edad es buena para colaborar con ilusión... y eso que por la tarde le tocará correr.
Parte del equipazo de colaboradores.
Un gran locutor. Está en todas, como siempre. Javier Laguía.
Como si fuera un paso de semana santa, el traslado del pesado estrado para la entrega de trofeos se efectúa con precisión.
Son las 16:30. Hora de inscribir a los que todavía no disponen de dorsal.
En los homenajes previos se han destacado dos ejemplos de superación y esfuerzo. El primer caso ha sido el de la atleta María Fuertes...
... y el segundo el de ANUDI. Bravo por ellos.
Foto de grupo previa al inicio de las carreras.
Emma Buj, alcaldesa de Teruel, entrega un plato conmemorativo del XXV aniversario del Cross a Carlos Casas. El Cross Promesicas lleva 25 años generando ilusión entre los deportistas más pequeños.
Así da gusto. Amigas aunque estén en plena carrera.
Muchos atletas mayores del club, atentos por si tienen los atletas cualquier pequeño traspiés.
El público nunca falla en el Promesicas.
La alegría de estar tan cerca de la meta. Lo ha conseguido. Bravo.
Al llegar, entrega de la bolsa del corredor, con una mochilita, agua, fruta y un diploma acreditativo de haber llegado.
Zona de espera a los familiares al terminar la carrera.
Atletas mayores animando a las corredoras.
En la zona de cámara de llamadas y calentamiento, listos para comenzar a moverse.
Calentamiento. Su carrera va a comenzar en pocos minutos.
Llegada a meta. No faltan los medios de comunicación. Como en las grandes pruebas.
La alegría de llegar a meta.
Y la alegría antes de salir.
Los últimos metros, desde dentro.
No bailan, van en fila a la entrega de trofeos. De ahí las caras de satisfacción.
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